Cuando las paredes hablan

La semana nos deja con un nuevo estampado en mi calle y una nueva capa para el palimpsesto de Sombrerería 20 (más detalles en Escrito en la Pared).

Las paredes hablan de la vida y hablan de nosotros. Uno de los proyectos que más me han gustado -y emocionado, que ya es mucho- este año en ARCO ha sido el de unas chicas premiadas por la Obra Social Cajamadrid, que han capturado con telas las formas y texturas de las casas abandonadas de un viejo barrio de Valencia a punto de ser demolido. El gran rollo de tela estampado se acompaña de un documental donde se las puede ver subidas en andamios, de casa en casa, grapando telas a paredes y techos, buscando técnicas para impregnarlas de su sudor.

Tiene la belleza del esfuerzo artesano y la poética del trabajo con la memoria. Quizás sólo por eso haya merecido reconciliarme con ARCO y asistir de nuevo al circo de la feria, aunque mi única motivación previa fuera saludar a un viejo amigo que expone en el Expanded Box.

Mientras los espacios públicos se estrechan para confinar el arte en ferias y mercados, la calle se rebela como escenario artístico del readymade clandestino. No en vano, se le llaman “intervenciones” pues nadie las invita a pasar y tomar la palabra. Pero ¿qué es arte? ¿todo es arte? ¿es arte lo que hay en ARCO?